Los gastos de constitución son los costes que deberá asumir la empresa, antes de que el negocio genere ingresos. Además del monto del capital social mínimo, que puede oscilar entre los 3.000 euros de la S.L. (Sociedad Limitada) y los 60.000 de la S.A. (Sociedad Anónima) existen otros gastos en los que el emprendedor incurrirá.
