Liderazgo y productividad ¿tienen relación?

Existen diferentes tipos de liderazgo del que surgen distintos tipos de organizaciones.

Tipos de liderazgo

En el liderazgo piramidal, el directivo que se encuentra en la cima de la pirámide es el que determina qué tipo de labor es prioritaria, por dónde deben ir los planes estratégicos, cuál es el tipo de motivación con la que se elevará la calidad de nuestros productos, etc. Tanto los directivos a su servicio como los empleados acatarán las decisiones. Es él el máximo responsable de las decisiones que toma y, normalmente, no implica demasiado a la plantilla, ya sea que se cometan errores o se recojan elogios o éxitos.

Normalmente, los estilos de liderazgo basados en el sistema piramidal pueden tener como consecuencia que el trabajador se sienta menos implicado, por lo que tendrás que pensar en motivar a tus empleados aunque no sean ellos los que toman las decisiones.

Por su parte, el liderazgo horizontal es aquel en el que se aportan soluciones sea cual sea el problema que se produzca, es el líder que propone, opina y pregunta antes de ordenar; y sobre todo, no juzga a sus empleados por sus resultados.

Por último, el liderazgo optimista, es aquel que se concentra en los factores que reconocen el esfuerzo de los trabajadores y que los motiva para que tengan las mejores condiciones, según Margaret Greenberg y Dana Arawaka recogen en un estudio que “el liderazgo positivo está ligado al optimismo, el compromiso y el rendimiento del empleado”.

El liderazgo realizado de manera positiva influye directamente en el nivel de satisfacción personal y, por consiguiente, en el nivel de productividad de la empresa.

Liderazgo y productividad

¿Existe relación entre liderazgo y productividad? Desde luego, da igual qué tipo de liderazgo desempeñes, existe una relación directa entre el liderazgo, la motivación que produzcas en tus trabajadores, los objetivos que queréis conseguir si se han desarrollado planes conjuntamente; y los resultados que obtengas.

Será fundamental que te emplees como líder para superar malas situaciones en la empresa. Si es necesario, adapta el tipo de liderazgo que realices dependiendo del momento que se esté viviendo en la empresa. Ten en cuenta que, manejar las diferentes formas de organizar la empresa te puede dar un margen de mejora en algunos aspectos que no estén correctamente organizados. Pon en práctica cómo los diferentes tipos de liderazgo afectan a los ratios de productividad de la empresa.

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