Teorías de la empresa: componentes y actualización

Todas las organizaciones tienen sus propias teorías de la empresa. Se trata de algo sorprendente, pero, a la vez, una realidad poderosa, tanto como el impacto de las consecuencias de una teoría válida que sea clara, consistente y enfocada.

Sin embargo, lo que subyace al malestar actual de tantas organizaciones grandes y exitosas en todo el mundo es que su teoría del negocio ya no funciona.

Cada vez que una gran organización entra en crisis, y especialmente si ha tenido éxito durante muchos años, la gente culpa, entre otras cosas, a la lentitud o la excesiva burocracia. ¿Se trata de una explicación plausible? Sí, aunque rara vez relevante o correcta.

 

TEXT - TOFU - Tipos de empersa

 

Lo que puede explicar el hecho de políticas, prácticas y comportamientos que funcionaron durante décadas, dejen de funcionar para la organización en la que fueron desarrollados tiene que ver con el entorno, lo que sucede de puertas para fuera y no lo que existe en su interior.

Y es que la realidad a la que cada organización se enfrenta ha cambiado bastante, sin que hubiese quedado tiempo suficiente para adaptar las teorías de la empresa a los nuevos tiempos.

 

 

¿Cuáles son los componentes de las teorías de la empresa?

Las teorías de la empresa, aunque diferentes entre sí, coinciden en sus componentes. Es común que presenten tres partes diferenciadas, cada una con sus supuestos. Son las siguientes:

  1. La información acerca del entorno de la organización, la sociedad y su estructura, el mercado, el cliente y la tecnología. En base a ella se articulan supuestos que explican por qué la demanda pagará por los productos y servicios de la empresa.
  2. El propósito que detalla la misión específica de la organización. En este caso, los supuestos definirán lo que una organización considera resultados significativos, cómo se ve a sí misma marcando una diferencia en la economía y en la sociedad en general
  3. La idea acerca de las competencias centrales necesarias para cumplir la misión de la organización. En lo que respecta a este componente, los supuestos que se articulen definirán dónde debe sobresalir una organización para mantener el liderazgo.

Aunque puede parecer simple, en realidad, convertir todo esto en teorías de la empresa válidas puede requerir de años de arduo trabajo, reflexión y experimentación. De la profundidad en la investigación se conseguirá una mayor consistencia y validez. Pero no valen las copias ni las imitaciones, cada organización debe trabajar en la suya propia.

 

¿Cuándo hay que actualizar las teorías de la empresa?

Cuando las teorías de la empresa muestran los primeros signos de obsolescencia, es hora de volver a pensar, de volver a preguntar qué suposiciones sobre el medio ambiente, la misión y las competencias centrales reflejan la realidad con mayor precisión, y no hay que dejar para más tiempo antes de analizar el entorno y los procesos internos, con la premisa clara de que los supuestos en los que se basaba el modelo anterior ya no son suficientes.

 

Para evitar las consecuencias de teorías de la empresa obsoletas, hay que llevar cabo procesos de cuidado preventivo, a través de los que incorporar a la organización la monitorización y prueba sistemáticos que permitan a su teoría ganar en relevancia.

Por último, no hay que echarse atrás a la hora de repensar una teoría que se está estancando y tomar medidas efectivas para cambiar las políticas y prácticas, alineando el comportamiento de la organización con las nuevas realidades de su entorno, con una nueva definición de su misión, y con nuevas competencias básicas que desarrollar y adquirir.

 

Créditos fotográficos: fizkes y phototechno

 

POST - TOFU - Tipos de empresa


Entradas relacionadas

No hay comentarios

Todavía no hay ningún comentario en esta entrada.

Deja un comentario