Qué es un landing page: funcionamiento y componentes

Quienes saben qué es un landing page tienen claro que puede considerarse como el inicio de una relación muy fructífera con una persona de su interés. Hablamos, del buyer persona y del punto del top of the funnel donde inicia su recorrido, ese que denominamos “el viaje del cliente”.

Es a través de esta página como la marca puede intercambiar valor en forma de respuesta a una cierta duda, por datos personales, la información de contacto de un prospecto que pasa a ser lead cuando nos deja su nombre, email y algunos otros datos.

¿Qué es un landing page y cómo funciona?

Para entender qué es un landing page hace falta saber que se trata de un lugar en internet donde los visitantes se convierten en clientes potenciales. Puede estar ligada a una página web o a un blog, encontrarse en un pie de página de algún email o colocarse en una página de recursos o de producto. También las hay en banners, pop ups y menús desplegables.

Más importante que la ubicación, aunque se trate de un detalle que también cuenta; es su funcionamiento. A través de un enlace, el visitante debe “aterrizar” en una página donde se le proponga obtener algo valioso a cambio de dejar su información de contacto.

Los puntos clave del funcionamiento de una landing page son:

• El contenido, simulación o descuento que se va a descargar no puede tener ningún coste, ha de ser gratuito.
• Que la única forma de obtener el descargable sea a cambio de dejar la información requerida.

Todo en el diseño de esta página debe encaminarse a facilitar la conversión del visitante. Por eso, las cosas tienen que estar claras. Evitar la confusión, que puede derivar en desconfianza, y facilitar el trámite en la medida de lo posible son dos buenas prácticas a tener en cuenta.

¿Cuáles son los componentes de una landing page?

Cada landing page es un mundo, pero, al final, en la mayoría se observan una serie de elementos comunes, como los siguientes:

1. Titular. Tiene que resumir lo atractivo de la oferta en pocas palabras y resultar convincente. Es lo primero que se ve y debe captar la atención de los visitantes.
2. Texto. Debe estar bien redactado y servir al propósito de la landing. Mucho mejor si incluye datos que aporten confianza.
3. CTA. La llamada a la acción es una de las partes clave, como entienden quienes saben qué es un landing page.
4. Formulario. A través de él se podrán recoger los datos de clientes potenciales. Fuerte llamado a la acción.

¿Cómo dirijo tráfico a mi página de destino?

La propuesta de valor es un elemento clave para lograrlo, aunque con eso no basta. Además de una landing page bien hecha, es siempre beneficioso contar con contenido de referencia convincente, publicaciones frecuentes en redes sociales, guest posts en otros blogs, participaciones en foros relevantes, boletines informativos por correo electrónico e incluso, a veces, conviene complementar estas acciones con la publicidad de pago o el marketing de influencia.

Créditos fotográficos: Halfpoint