¿Cómo es el ADN del emprendedor español?

El emprendedor español nace, no se hace. Así la afirma el Estudio Hiscox ADN del emprendedor español publicado recientemente sobre el perfil del empresario en nuestro país. En el destaca que el emprendedor español, junto con el francés, es el que más horas semanales dedica al trabajo -alrededor de 47 horas a la semana- frente a otros países en los que la jornada laboral se sitúa en 42 horas. Quizá la respuesta esté en tener más de media hora para el almuerzo. Pero sea como fuere, lo cierto es que la pyme española es la que menos descansa, si se tiene en cuenta además, que en lo referente a días de vacaciones, el empresario española toma una media de 20 días solo por detrás de Estados Unidos (donde la media se sitúa en 10 días) frente a los 26 días vacacionales de los Países Bajos.

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Entre las razones para emprender destaca la vertiente vocacional, es decir, el 59 % de los encuestados se considera un emprendedor nato, pues siempre había tenido en mente establecerse por su cuenta llegado el momento oportuno, y solamente el 6 % estaba en desempleo o no encontraba el trabajo deseado (31 %). Por lo tanto, emprender no se postula como una salida al paro sino que en esta decisión tienen más peso la motivación y el poder desarrollar una actividad de forma independiente. En la mayoría de los casos, la inexperiencia no ha supuesto un «handicap» ya que el 51 % de los emprendedores no tenía experiencia previa, solamente el 36 % procedían del mismo sector.

Cuando los emprendedores españoles son preguntados por los principales rasgos que tiene que tener un empresario para triunfar destacan la independencia, la capacidad para dirigir a las personas, el trabajo duro y la constancia, la determinación e inteligencia y la astucia. Estos son los principales ingredientes que conforman el ADN del emprendedor español.

Por otro lado, los aspectos que más valoran nuestros emprendedores es la flexibilidad en la jornada laboral (64 %) y la sensación de tener mayor control sobre sus vidas (59 %), comparado a un trabajo por cuenta ajena en una multinacional. Asimismo, la posibilidad de trabajar desde distintos lugares -en casa frente a la oficina- es valorada por el 56 % de los encuestados, gracias al trabajo en red y las nuevas tecnologías. Por último, destacan la capacidad de influenciar en la dirección del negocio (53 %).

En cuanto a la percepción del futuro, la mayoría mira con optimismo ya que el 77 % de los empresarios españoles no solamente no prevé tener que cerrar su negocio en los próximos 5 años sino que además el 27 % tiene intención de contratar más personal en 2016 . En este sentido, por segundo año consecutivo, España supera la media en percibir un futuro mejor (65 % frente al 62 % de otros países encuestados). No obstante, llama la atención que nuestro país ni es considerado ni lo consideramos como un país con espíritu emprendedor frente a Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Holanda y Francia.

Aunque los emprendedores españoles consiguen mayor financiación para sus proyectos de entidades bancarias que los de otros países (25% frente a la media del 16 %), el 70 % de los encuestados señala la falta de implicación del Gobierno y la burocracia gubernamental como uno de los principales problemas del día a día. De hecho, afirman dedicar una media de 2 a 3 horas semanales a temas relacionados con la Administación. Por ello, entre las medidas que sugieren los encuestados para alimentar el sueño emprendedor en España están suavizar el actual sistema de impuestos y las leyes laborales y facilitar la relación entre empresario y Gobierno haciendo más simple y llevadera la actual normativa contable.

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