Umbral de rentabilidad: consejos de cálculo

El umbral de rentabilidad, también conocido en el plano empresarial como punto muerto, hace referencia al número de productos o servicios que un negocio debe vender para cubrir tanto los gastos directos como los gastos totales de dicho proceso.

O dicho de otro modo, y empleando la figura tantas veces utilizada de los balances con líneas de productividad, el umbral de rentabilidad es la frontera a partir de la cual un negocio deja de estar en números rojos y pasa a tener números positivos, es decir, el momento en el que empieza a ganar dinero y, por tanto, rentabilidad.

 

 

El umbral de rentabilidad suele ir asociado a proyectos concretos u operaciones en las que una empresa establece  plazos fijos de retorno de inversión y de ganancias. Si dicho punto nunca llega, es porque el proyecto o la iniciativa han fracasado de algún modo.

 

Conceptos relacionados con el umbral de rentabilidad

Antes de exponer cuál es el procedimiento para calcular el umbral de rentabilidad, convendría analizar un par de conceptos que están directa o indirectamente ligados:

• Costes fijos:

Se refiere a todos aquellos en los que incurre un negocio independiente de lo que vaya a vender o el escenario donde lo haga. Es decir, son gastos que se contraen tanto cuando vendemos como cuando no lo hacemos. Por ejemplo, los costes de la luz, el agua y el alquiler forman parte de esta categoría.

• Coste variable medio:

Habla de los costes que varían en función de indicadores como el volumen de venta, la producción o las perspectivas comerciales. Si una empresa aspira a vender más de 1.000 artículos no gastará lo mismo que si en otro momento del año o del mes tiene previsto vender 700 artículos.

• Precio de venta:

Corresponde al precio con el que el producto, artículo o servicio sale a la venta. Si un negocio tiene un solo producto, lo normal es que este precio no varíe; pero si son más de uno, y si cada cual presenta variedades, el negocio habrá de fijar un precio para cada artículo. La media de todos los productos se llama precio de venta medio.

 

¿Cómo se calcula el umbral de rentabilidad de un negocio?

El umbral de rentabilidad se puede calcular en términos cuantitativos. Por ejemplo, un negocio que haya invertido 1.000€ en la publicación de 200 ejemplares de un libro, cada uno de los cuales tendrá un coste de 25€, llegará a dicho punto en el momento en que haya vendido un total de 40 ejemplares. A partir de ese momento no sólo habrá recuperado la inversión inicial, sino que obtendrá beneficios directos.

Para el cálculo del umbral de rentabilidad es necesario hablar de un cuarto concepto: el margen de contribución, el cual se obtiene de la diferencia entre el precio de venta de un producto y el coste variables del mismo.

Dicho lo anterior, la fórmula estándar que se usa en gestión financiera y contabilidad para calcular el umbral de rentabilidad se plantea de la siguiente manera:

Umbral de rentabilidad: Coste fijo total / Margen de contribución

 

Recuerda que más allá del valor numérico que obtengas, lo realmente importante del umbral de rentabilidad es la utilidad del mismo, por ejemplo para realizar cálculos, proyecciones y expectativas de venta en ese mismo ciclo o en otros.