Exportar a China: trámites aduaneros
China se ha convertido en un socio comercial al que es imposible mirar de soslayo. En los últimos años, su economía se ha posicionado como la segunda en el orden mundial y sus empresas han establecido nuevas alianzas para ganar presencia y protagonismo en casi todos los rincones del planeta.
Tras ser el motor de la economía asiática durante décadas, ahora ha dado el salto al mercado internacional, convirtiéndose en socio estratégico de países como Sudáfrica, Brasil, Perú, México y, por supuesto, Estados Unidos y de la Unión Europea.
Aunque durante 2015 ha frenado su ascenso al primer puesto de la economía mundial, que continúa en manos de Estados Unidos, el gigante asiático ha supuesto una gran oportunidad de desarrollo en infraestructuras y de exportaciones para las economías emergentes o de aquellos países afectados por la crisis de 2008.
España-China, una vía exitosa para las exportaciones
Con respecto a España, los lazos se han estrechado aún más en estos años. Tras una primera etapa en la que apenas se intercambiaban unos cuantos productos, a partir del año 2008 la relación se ha consolidado.
Según datos oficiales, China es el mercado internacional que más ha crecido para los exportadores españoles en ese lapso, con cerca de casi el 48%. Los productos cárnicos, especialmente el jamón, son los que más han contribuido a esta situación al reportar beneficios cercanos a los 114 millones de euros anuales.
¿Cómo exportar a China? Trámites aduaneros
El contexto es inmejorable para que los empresarios españoles continúen en la línea de exportar productos a dicho país. Sin embargo, esto también supone un conocimiento detallado de las condiciones aduaneras chinas. Hagamos un repaso por los aspectos más relevantes de este proceso:
1) El Código de Sistema Armonizado de la nomenclatura de los productos no es el mismo. En China suelen variar los últimos dos dígitos
2) El importador chino debe tener un Código de Registro de Aduana, que es una especie de licencia que les permite recibir los productos que provienen de España. Antes de cerrar un negocio, es importante saber si la contraparte china tiene uno de estos códigos en propiedad.
3) Los productos que lleguen a China deben tener la documentación que avale su presencia en el país: factura con los datos del productor, declaración de bienes, certificado de origen y un talón de cargo.
4) Aquellos productos que por su denominación o naturaleza supongan riesgos o consideraciones adicionales, deben ir acompañados de documentos respectivos, como por ejemplo el certificado de sanidad o las fechas de embalaje.
5) La China Quality Certification Center, organismo encargado de velar por la calidad de los productos, tiene facultades para realizar inspecciones en las fábricas y verificar los procesos de producción. Si se cumple con los requisitos establecidos en la ley china, el producto recibirá la Certificación Compulsoria China (CCC), el cual le avala para su comercialización.
6) Para las autoridades chinas, la etiqueta de los productos debe elaborarse según un formato único. En ella se deben incluir los siguientes datos: nombre y marca del producto, información de los ingredientes, volumen o peso, fecha de producción, productor, país de origen o la fecha de vencimiento, entre otros.
Post relacionados:
- Definición y principales tipos de diversificación empresarial
- ¿Cuáles son los beneficios de exportar productos o servicios?
- ¿En qué consiste el análisis Pestel de entornos empresariales?
Deja un comentario
No hay comentarios
Todavía no hay ningún comentario en esta entrada.