Cómo seleccionar los mejores perfiles profesionales

Tu compañía necesita incorporar nuevos perfiles profesionales. ¡Enhorabuena! Sin duda, es un indicador positivo de la dinámica de tu empresa, especialmente en estos tiempos en que el desempleo es la mayor preocupación de la sociedad española.

En efecto, la complejidad para encontrar trabajo en nuestro país lo demuestra el informe elaborado por Asempleo (Asociación de Empresas de Trabajo Temporal) que indica que en España hay 110 parados por cada puesto de trabajo. Es una proporción muy elevada que también pone de relieve la dificultad para seleccionar las personas adecuadas ante una oferta de candidatos tan grande.

Si tienes presupuesto para ello, te recomendamos que confíes en un headhunter la selección del perfil. Pero si eres un emprendedor quizás te veas en la necesidad de asumir esa responsabilidad. Así pues, ¿qué aspectos debes tener en cuenta a la hora de seleccionar los mejores perfiles profesionales que tienes sobre la mesa?

Las prisas son malas consejeras

Esta debe ser tu primera regla. Y es que contratar personal no es fácil, y conseguir personal cualificado, con la actitud y la confianza necesaria es aún más difícil. Tómate el tiempo necesario para describir el perfil que buscas: qué funciones realizará, responsabilidades y limitaciones, requerimientos técnicos, horario y condiciones económicas. No te olvides indicar cualquier otro aspecto que consideres relevante para el puesto.

Define bien las condiciones salariales

Las condiciones de contratación y el salario deben quedar muy claros para evitar posibles problemas presupuestarios o, peor, legales. Antes de empezar el procesio de selección, evalúa a fondo lo que puedes pagar, especialmente si eres una pequeña empresa o estás emprendiendo. Piensa también las condiciones que ofreces que pueden compensar un sueldo contenido (si ese es el caso), la evolución del sueldo y condiciones a lo largo del tiempo o tener en cuenta escenarios. En este aspecto, la claridad es la mejor prevención de problemas, tanto para tu empresa como para el futuro empleado.

Difunde tu oferta por medios públicos o privados

Una vez definidos el perfil, las condiciones y el sueldo. Llega el momento de conseguir candidatos. Tienes dos opciones: hacer pública tu oferta de empleo o hacer como la mayoría: mantenerla oculta y utilizar tu red de contactos de confianza (familiares, amigos, proveedores, etc.). Según un informe de Adecco, el 80% de las ofertas no llegan al mercado de trabajo por motivos de confidencialidad o de estrategia empresarial. Pero si decides hacerla pública, te recomendamos que utilices los servicios gratuitos de publicaciones en diferentes webs de empleo.

Tus prioridades son el mejor filtro

Empiezan a llegar currículums de los posibles candidatos. Y aquí empieza el trabajo duro para filtrar todas las ofertas que recibas, que serán muchas. Establece tus prioridades y céntrate en ellas. Por ejemplo, si buscas experiencia, elige en primer lugar a los candidatos que cumplan este requisito. También debes tener en cuenta el nivel formativo y las referencias, que te permitirán investigar y obtener información adicional sobre el candidato en trabajos anteriores.

Deja que tu intuición también te aconseje

Por fin, llega el momento de la entrevista personal con los candidatos seleccionados. Sabemos los datos objetivos del currículum, pero ahora podremos conocer y tratar a la persona. Aquí la primera impresión es importantísima: como va vestido, como se comporta, qué actitud muestra y, especialmente, qué confianza te genera. Observa su postura corporal: su forma de sentarse o de mover los brazos, la seguridad con la que se expresa o te mira. Ten en cuenta que las personas expresamos un 20% con palabras y un 80% con gestos. Y ahora deja que tu intuición te diga si ese candidato podría incorporarse a tu equipo.

¿Tienes que seleccionar nuevos perfiles profesionales? ¿Qué aspectos valoras más para elegirlos?

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