Todo lo que debes saber sobre las criptomonedas

La sola palabra nos sitúa en un lugar incierto: criptomonedas. A primera vista podría sonar a dinero encriptado, a capitales ocultos o a unos beneficios monetarios a los que no podemos acceder de forma directa. ¿Qué tan lejos estamos de la definición real? Te lo contamos a continuación en el siguiente post.

Criptomonedas, un producto propio de nuestro tiempo

La palabra criptomonedas ha irrumpido con fuerza en los últimos dos o tres años. La escuchamos de forma recurrente en medios de comunicación y en ciertas áreas del conocimiento, especialmente en los campos relacionados con las finanzas.

Sin embargo, pocas son las personas que hasta el momento podrían definir con claridad qué son exactamente, cómo se pueden usar y, sobre todo, qué tipos de beneficios son los que suponen a sus portadores.

En lo que sí parece haber un gran consenso es que se trata de dinero virtual, es decir, no podemos tocarlo ni olerlo pero, a la vez, tiene infinitas posibilidades de uso. Dicho de otro modo, es un producto característico de los tiempos de la digitalización, el Big Data, el desarrollo de nuevas tecnologías y el impulso de nuevos tipos de comercio mundial.

Muchos lo entienden como el paso lógico tras la consolidación del dinero virtual, el cual supuso en su momento una innovación más o menos similar a la que están generando las criptomonedas. ¿Recuerdas cómo te sentiste el día en que pagaste un producto por primera vez algo con tu tarjeta de crédito o de débito?

Las dudas más frecuentes sobre las criptomonedas y su uso

Cada vez son más personas las que se interesan por el uso de las criptomonedas. La gran mayoría de ellas vienen atraídas por a posibilidad de comerciar con este tipo de dinero y obtener beneficios a medio o largo plazo.

Los expertos aseguran que si bien no está muy claro cuál es su funcionamiento ni los medios para adquirirlas, su uso estará prácticamente generalizado en un par de años, tal como sucedió con el dinero virtual o, incluso, con otras herramientas tecnológicas como la aparición del correo electrónico o los teléfonos móviles.

En esta primera fase de desarrollo de las criptomonedas es lógico que surjan muchas dudas e inquietudes al respecto. Por ello, en esta ocasión queremos contribuir a una información más detallada, eficaz y útil. Echa un vistazo a algunas de las preguntas que más se repiten cuando hablamos de estas monedas:

• ¿Cuándo surgió la primera criptomoneda?

El Bitcoin data del año 2009 y desde ese momento su evolución no se ha detenido. Se ha definido el concepto, sus usos y se ha abierto un mercado para su comercio, el cual está ahora mismo en permanente expansión. Pero no sólo eso: el Bitcoin, en su calidad de divisa precursora, ha dado pie a muchas otras criptomonedas que en este momento buscan hacerse un hueco.

• ¿Cómo es el comercio con criptomonedas?

La idea del asunto es que cambies tu dinero físico por criptomonedas y luego las uses para hacer transacciones. Hay dos tipos de usuarios: el inversor, que es quien compra criptomonedas con la esperanza de que su valor aumente en el medio o largo plazo para venderlas más adelante y obtener beneficios; y, por otro lado, el agente, que es el que se ocupa de cambiar un tipo de criptomonedas por otras, por ejemplo el Bitcoin por el Ether o viceversa.

• ¿Dónde sucede el comercio con criptomonedas?

El comercio con criptomonedas tiene lugar en el mercado virtual, concretamente en un espectro similar al de la Bolsa de Valores. Allí es donde se les asigna un precio de transferencia y ocurren los movimientos con esta divisa.

• ¿Quién emite las criptomonedas?

En esta primera fase de desarrollo, las criptomonedas no tienen restricción para ser emitidas. Cualquier agente o usuario puede crear la suya y ponerla en el mercado para comerciar con ella. Sin embargo, no se descarta que un futuro las entidades financieras y los bancos de carácter privado asumen dicha tarea para garantizar un mayor respaldo a las inversiones realizadas.

• ¿Cuánto vale una criptomoneda?

Nadie lo sabe con certeza. Su valor varía de la misma manera que el de las acciones en la Bolsa de Valores, pues depende de muchos factores. Para que te hagas una idea, 1 Bitcoin valía 13.000 euros el pasado 27 de diciembre, pero una semana más tarde su valor había fluctuado entre los 15.000 y los 9.000 euros. Es casi como una apuesta o una tirada de dados. De hecho, muchos especialistas en finanzas señalan esta circunstancia como uno de los principales riesgos de las criptomonedas, al que también añaden la piratería y las estafas a través de internet.

El Petro: criptomonedas con respaldo de los Estados

Recientemente hemos asistido al lanzamiento del Petro, la criptomoneda con la que el gobierno venezolano aspira a mitigar la crisis económica que afronta su país y abrirse a nuevas relaciones y transacciones en el terreno global.

El Petro se define como una criptomoneda más, aunque en realidad posee una serie de características que la hacen distinta al resto.

Por ejemplo, es una divisa virtual que sí tiene respaldo de las instituciones estatales venezolanas, las cuales se encargan de su emisión, control e intervención. Es decir, no está en manos de particulares. Aparte de ello, su respaldo son los barriles de petróleo que el país produce y exporta a destinos como Estados Unidos o Europa.

Con todo y eso, algunos críticos de esta medida señalan que aún falta mucho trabajo para dar forma a la nueva divisa y de momento la califican como una nueva versión de los bonos de deuda que el país adquiere anualmente.

Sin embargo, Venezuela no es el único país que ha empezado a sondear este tipo de opciones. También naciones como Rusia o Turquía valoran actualmente la creación de una criptomoneda similar al Petro. Incluso, se habla de que China, dado su importante rol en la economía mundial actual, ha empezado a planteárselo.